VIII COPA ACES

INSCRIBETE

Single

Dobles

CONTROLAR TU ATENCIÓN ES VITAL

“Controla tu atención y podrás mejorar en todo” Para aquellos quienes desean llegar a ser tenistas de alto rendimiento, el entrenamiento psicológico es complejo. Hay que realizar muchos ajustes mentales para lograrlo, sin embargo, hay un elemento clave en todos ellos: Controlar la Atención.

Si resumimos lo que le hace falta a un tenista en la cancha, podríamos decir que necesita tres cosas: Identificar lo que debe hacer en cada situación de juego, ejecutarlo correctamente y controlar sus emociones cuando lo realiza. Todo ello mejora cuando el atleta está metido en el partido.

Controlar la atención es hacer que la mente consciente se enfoque en algo y que lo demás quede fuera de ella. Si la mente se dirige hacia un solo elemento, la atención esta totalmente concentrada. Cuando el atleta  debe prestar atención a varios elementos al mismo tiempo, su atención esta dividida. El tenista está obligado a desarrollar esta habilidad, porque necesita concentrar su atención en determinados momentos, pero debe funcionar con atención dividida la mayor parte del tiempo.

Percibir dos cosas al mismo tiempo o pensar en ellas no es un problema. La dificultad aparece cuando alguna de esas cosas no tiene nada que ver con el partido o no favorece el desempeño. 

Si embargo, cuando la mente consciente del atleta toma en cuenta solo aquello que sea necesario para jugar al tenis y desecha lo demás, él esta controlando adecuadamente su atención. Esto produce mejorías en su toma de decisiones, su ejecución motora y su estado emocional. Pero si la atención del tenista se dispersa descontroladamente, se obtiene el efecto contrario y ahora veremos por qué.  
 
Tus decisiones
 
Para poder tomar decisiones acertadas, el tenista debe enfocar su mente en la situación de juego, eso le permite percibirla. También tiene que enfocarse en construir dentro de su mente una seguidilla de tres golpes. Eso significa que el atleta debe: (1) en identificar la jugada adecuada, (2)pensar cuál podría ser la respuesta del oponente y (3) decidir como ejecutar su propia posterior devolución ante esa respuesta anticipada del contrario.
 
Si el atleta está pensando en el marcador, en sus familiares que lo observan, en las consecuencias que tendría si falla, en el partido de al lado… entonces, la mente no se ocupa de hacer todo lo anterior. Este tenista podría “por ejemplo” perder una oportunidad de winner porque no la identifica, volverse indeciso porque no dilucida si debe atacar o defender, o quedar sorprendido, ya que no anticipa la devolución del oponente.
 
 
Tu ejecución motora
 
Ya sea por fallas técnicas del propio tenista o por la necesidad de adaptarse al juego del oponente, todo partido requiere ajustes en la ejecución de los golpes y movimientos. El tenista necesita estar constantemente teniendo pensamientos que controlen su motricidad.
 
El entre punto es el momento adecuado para hablarse a si mismo mentalmente diciéndose lo que debe hacer cuando comience a disputar el próximo tanto: “ajusta la terminación del golpe… controla la fuerza… más rápido… has el Split”.
 
Luego, durante la ejecución, es necesario mantenerse pendiente de cumplir con lo que dicen tales pensamientos.
 
Si el jugador distrae su mente en otros asuntos, estos pensamientos auto-correctivos no aparecen. Y en el caso de que si ocurran, luego el tenista no cumple sus propios mandatos, porque se olvida de ellos cuando la pelota se pone de nuevo en movimiento.
 
 
Tus emociones
 
Usualmente, las emociones desagradables del tenista (rabia, miedo, angustia, etc.) lo llevan a cometer errores y estas son generadas por los diversos pensamientos negativos o estresantes que pasan por su mente. Dichos pensamientos nada tienen que ver con la ejecución; es decir, no se refieren a lo que el tenista debe hacer o dejar de hacer en el partido.
 
Al enfocar la mente en aquello que debemos hacer al momento presente, todos esos pensamientos destructivos quedan eliminados. Es por esto que la concentración mejora las emociones del deportista. 
 
En conclusión, al controlar tu atención, puedes mejorar tus decisiones, tus movimientos y tus emociones. Si lo logras, estarás por buen camino. Si “no lo logras”, estarás perdido(a).  
 
Escrito Por Leopoldo Ferrer

placebo
sound by Jbgmusic